En las primeras horas del 26 de marzo de 2024, el buque portacontenedores MV Dali chocó contra el Puente Francis Scott Key en Baltimore, Maryland. El puente colapsó en menos de un minuto, enviando autos, maquinaria, carga e incluso personas a las frías profundidades del río Patapsco.
Más allá del costo humano del colapso, los impactos económicos y sociales son evidentes; su cierre afecta directamente a la economía local y nacional. Miles de millones de dólares en bienes procesados a través del puerto ahora enfrentan obstáculos significativos, lo que podría afectar el empleo y los ingresos en la región.
Para minimizar las interrupciones en la cadena de suministro, los gobernadores de Nueva Jersey, Phil Murphy, y de Nueva York, Kathy Hochul, emitieron una declaración conjunta afirmando que pueden transportar carga adicional a los puertos de sus estados.
El reciente colapso del puente Francis Scott Key no solo ha causado una tragedia humana y un desastre logístico, sino que también ha sacudido el mundo de los seguros. Este evento, considerado uno de los mayores siniestros en la historia del seguro marítimo, tiene el potencial de redefinir el panorama de los costos de seguros para los próximos años
Implicaciones del Seguro
Según informes, este desastre podría costar a las compañías de seguros hasta 4 mil millones de dólares y es probable que se vean cambios en las tarifas de los seguros marítimos. Esos cambios podrían ser significativos, debido a que las aseguradoras buscarán recuperar las pérdidas que enfrentan.
Con este colapso del puente, aproximadamente 80 reaseguradoras diferentes contribuyen a cubrir las pérdidas. Estas son las empresas que ayudan a las aseguradoras a cubrir los riesgos que enfrentan. Si bien esto no afectará dramáticamente a cada una individualmente, es una pérdida récord que resonará en el mercado de seguros. Es probable que esto también influya en las tarifas y políticas que las compañías de seguros ofrecen a sus clientes.
A continuación, algunas de las implicaciones que veremos presentarse:
1. Aumento de las Pérdidas Aseguradas: Las pérdidas aseguradas estimadas entre 2.000 y 4.000 millones de dólares presionarán a las aseguradoras y reaseguradoras a reconsiderar sus estrategias de precios. Este aumento en las reclamaciones podría traducirse en un incremento en los costos de seguros para los consumidores.
2. Presión sobre los Precios de Coberturas: La magnitud de las pérdidas, sumada a otros eventos recientes, podría resultar en un aumento en los precios de las coberturas de seguros marítimos a nivel mundial. Esto afectaría no solo a las empresas relacionadas con el transporte marítimo, sino también a los consumidores finales debido al aumento en los costos de los bienes transportados.
3. Reclamaciones por Daños y Responsabilidades: Las aseguradoras enfrentan un complejo tejido de pólizas involucradas en el siniestro, lo que podría resultar en un período prolongado de demandas y ajustes de reclamaciones. Además, las responsabilidades adicionales relacionadas con las muertes y las interrupciones comerciales podrían llevar a un aumento en los costos de seguros.
4. Impacto en la Disponibilidad de Reaseguro: El mercado de reaseguros, que ayuda a distribuir los riesgos, se llevará la peor parte de las pérdidas. Esto podría afectar la disponibilidad y los costos del reaseguro, lo que a su vez tendría un efecto dominó en los costos de seguros en diferentes ramos para las empresas.
5. Desafíos para la Industria Aseguradora: Las aseguradoras tendrán que gestionar un aumento en las reclamaciones y un entorno de costos crecientes. Esto podría llevar a una reevaluación de los modelos de riesgo y a una posible transformación digital para mejorar la eficiencia y la respuesta a eventos imprevistos.
Conclusión
El colapso del Puente Francis Scott Key no solo presenta desafíos significativos para las aseguradoras, sino que también subraya la importancia de una cobertura de seguros sólida frente a desastres imprevistos. A medida que las aseguradoras y reaseguradoras navegan por las secuelas de esta tragedia, es posible que el mercado de seguros en general experimente ajustes en las tarifas y los términos de cobertura. Además, el impacto de este evento en las economías locales y las comunidades sirve como un recordatorio contundente del papel crítico que desempeña la infraestructura en el sustento de los medios de vida y la facilitación del comercio. En adelante, la colaboración entre las agencias gubernamentales, las aseguradoras y otras partes interesadas será esencial para mitigar los riesgos y construir resiliencia contra incidentes futuros.
