La revolución de los vehículos eléctricos (EV, por sus siglas en inglés) no solo está transformando la industria automotriz, sino que también plantea nuevas realidades para el mundo de los seguros. En Estados Unidos, las ventas de vehículos eléctricos superaron el millón de unidades por primera vez en 2023, y en ciudades como Nueva York, los programas de incentivos siguen impulsando su adopción.
Cada vez más personas eligen autos eléctricos por razones ambientales, económicas o por incentivos estatales, y esta elección, lejos de ser un riesgo, representa una oportunidad para adoptar tecnologías más limpias y eficientes. Sin embargo, como cualquier innovación, también trae consigo desafíos específicos que deben ser contemplados al momento de asegurar estos vehículos.
En este artículo exploramos cómo la creciente adopción de vehículos eléctricos está impactando la industria aseguradora, qué coberturas nuevas se están desarrollando y cómo los propietarios pueden proteger su inversión sin perder los beneficios de esta nueva movilidad.
Riesgos particulares de los vehículos eléctricos
Elegir un vehículo eléctrico no significa exponerse a más peligros, pero sí requiere entender nuevas variables de riesgo para contar con una cobertura adecuada. Estos son algunos factores a considerar:
Alto costo de reparaciones Los EV requieren menos mantenimiento en general, pero sus componentes electrónicos avanzados pueden ser costosos de reparar. Un choque leve puede afectar sensores, cámaras o el sistema autónomo, lo que eleva el valor del siniestro.
Seguridad de la batería Las baterías de iones de litio, aunque seguras en condiciones normales, pueden representar un riesgo si sufren daños severos por impacto o sobrecalentamiento. Diversos estudios han demostrado que, tras un accidente grave, las baterías pueden incendiarse incluso horas después del impacto inicial, lo que representa un desafío adicional para los servicios de emergencia. Además, se han documentado casos en los que el proceso de reciclaje o eliminación inadecuada de baterías dañadas ha provocado incidentes ambientales. Reemplazar una batería puede costar entre $10,000 y $20,000, dependiendo del modelo del vehículo, lo que convierte esta cobertura en una prioridad dentro de cualquier póliza para vehículos eléctricos.
Infraestructura de carga Instalar una estación de carga en casa es una inversión valiosa, pero también una posible fuente de siniestros. Tormentas eléctricas, picos de voltaje o incluso vandalismo pueden dañarla.
Software y conectividad Muchos EV están altamente digitalizados y conectados. Esto los hace más eficientes y seguros, pero también los expone a riesgos tecnológicos. Por ejemplo, en 2022 se reportó un caso en el que una actualización remota del software de un EV causó la desactivación temporal de funciones de asistencia al conductor, generando una investigación federal en Estados Unidos. Además, marcas reconocidas han enfrentado vulnerabilidades que permitieron el acceso remoto no autorizado a funciones básicas del vehículo. Estas situaciones evidencian la necesidad de contar con coberturas que protejan ante fallos de software o posibles ciberataques. Fallos en el software pueden afectar el funcionamiento del vehículo o exponer información sensible del conductor.
La respuesta del mercado asegurador
Frente a esta nueva realidad de la movilidad eléctrica, las aseguradoras están evolucionando sus productos para responder de manera efectiva a los riesgos emergentes. Esta adaptación no solo responde a la demanda creciente de los propietarios de EV, sino también al compromiso del sector por brindar soluciones integrales y a la medida.
Hoy en día, muchas compañías están incluyendo cláusulas específicas en sus pólizas, desarrollando paquetes personalizados y ofreciendo asesoría especializada para quienes adquieren vehículos eléctricos. Entre las coberturas más relevantes que se están implementando se encuentran:
- Cobertura por fallos de software y ciberseguridad: contempla los riesgos derivados de la tecnología conectada, como interrupciones, vulnerabilidades o accesos no autorizados. Algunas aseguradoras ofrecen cobertura ante la pérdida de funcionalidades tras una actualización defectuosa, así como protección frente a ataques remotos que puedan vulnerar los sistemas de control del vehículo.
- Cobertura de responsabilidad civil extendida: en muchos EV, debido a su aceleración rápida y peso adicional por la batería, los accidentes pueden tener mayor impacto. Algunas aseguradoras han comenzado a ofrecer límites de responsabilidad civil más altos para adaptarse a este riesgo.
- Cobertura de valor garantizado o reposición total: para enfrentar la rápida depreciación de algunos modelos de EV, existen pólizas que ofrecen el valor de reposición total en caso de pérdida total durante los primeros años.
- Cobertura de incendio espontáneo o en recarga: ante el riesgo documentado de incendios por mal funcionamiento o fallos durante la carga, esta cobertura específica se está incluyendo como una extensión adicional en algunos planes.
- Asistencia en carretera especializada: considera el remolque a una estación de carga cercana y ayuda en casos de descarga completa.
Recomendaciones para asegurar tu vehículo eléctrico
- Elige aseguradoras que ofrezcan productos específicos para EV. Busca compañías que comprendan las particularidades de los vehículos eléctricos y que ofrezcan coberturas adaptadas a estos riesgos, como baterías, software, estaciones de carga y asistencia especializada. No todas las aseguradoras ofrecen estos beneficios, por lo que elegir con criterio es clave.
- Confirma que tu póliza incluya la batería y la estación de carga. Estos son dos de los activos más costosos y vulnerables en un EV. Asegúrate de que estén claramente especificados en tu cobertura para evitar sorpresas en caso de accidente, fallo técnico o vandalismo.
- Asegúrate de contar con asistencia en carretera especializada. Una descarga total o una falla en el sistema de carga puede dejarte varado. Las pólizas más completas ofrecen remolque a estaciones cercanas de carga o asistencia específica para vehículos eléctricos, lo cual marca una gran diferencia en la experiencia del propietario.
- Pregunta por coberturas tecnológicas que protejan tu vehículo frente a fallos digitales o ciberataques. El software juega un rol central en los EV. Desde actualizaciones remotas hasta funciones de conducción automatizada, tu póliza debe contemplar los riesgos asociados a errores de programación, vulnerabilidades de seguridad o ataques cibernéticos que puedan afectar tu seguridad o la operatividad del vehículo.
Conclusión
En Rondon Brokerage reconocemos que los vehículos eléctricos representan el futuro de la movilidad, y por eso es fundamental que sus propietarios cuenten con una protección a la altura de esta evolución. Nuestro equipo puede ayudarte a seleccionar coberturas modernas, flexibles y ajustadas a este nuevo panorama. Si estás pensando en adquirir un EV o ya conduces uno, contáctanos para asegurar tu inversión con confianza y visión de futuro.
