Un estudio reciente ha revelado que Nueva York enfrenta más riesgos de desastres por tormentas y huracanes que cualquier otra ciudad en EE. UU., debido al cambio climático. Zonas como Bajo Manhattan, Coney Island, el Aeropuerto Internacional JFK y Queens Midtown Tunnel están bajo una amenaza particular. El cambio climático está afectando la temporada de huracanes en Nueva York, con un aumento en la temperatura del agua del océano que fortalece a los huracanes y aumenta su alcance, así como mayores inundaciones debido al nivel del mar más elevado.
Preparando a Nueva York para Lluvias Extremas.
La temporada de huracanes en Nueva York, que se extiende del 1 de junio al 30 de noviembre, ha sido pronosticada por el Servicio Meteorológico Nacional como «por encima de lo normal» por séptimo año consecutivo, con un 65% de probabilidades. Ante esta perspectiva, el gobierno municipal de la ciudad ha puesto en marcha el plan «Rainfall Ready NYC», que insta a los neoyorquinos a conocer claramente los planes de emergencia en sus áreas residenciales y a estar atentos a todas las alertas, especialmente si han sido víctimas de inundaciones en el pasado.
El plan «Rainfall Ready NYC 2023» es un plan de acción para preparar al gobierno de la ciudad y a los neoyorquinos para enfrentar lluvias más extremas en el futuro. Lanzado en julio de 2022, se enfoca en medidas de infraestructura y resiliencia para proteger a los neoyorquinos de inundaciones y otros peligros climáticos. Se enfatiza en la inversión en resiliencia y en la preparación para mantener a la población a salvo.
Impacto del Cambio Climático en Desastres Naturales y la Industria de Seguros.
El cambio climático está teniendo un impacto significativo en la frecuencia y severidad de los desastres naturales. En California, la sequía ha provocado un aumento en los incendios forestales, lo que ha llevado a algunas compañías de seguros a dejar de aceptar nuevas solicitudes de pólizas en el estado. Además, el huracán Ida en el 2021 causó daños significativos en Nueva York y Nueva Jersey, con lluvias récord y vientos devastadores.
El aumento en la frecuencia y severidad de estos eventos naturales está planteando desafíos para la industria de seguros, que se enfrenta a un aumento en las reclamaciones de seguros de hogar. Es incierto si la no renovación de pólizas en áreas de clima extremo se convertirá en una tendencia, pero es algo que se debe vigilar en esta temporada de huracanes.
Ante este panorama, es importante que las ciudades y las personas se preparen y tomen medidas para adaptarse al cambio climático y reducir el riesgo de daños causados por desastres naturales. La inversión en infraestructuras resilientes y la concientización pública sobre la importancia de la preparación son pasos fundamentales para proteger a las comunidades ante los impactos cada vez más frecuentes de estos eventos extremos.